Soy fotógrafo desde que nací. La verdad es que no me acuerdo cuando realicé mi primera fotografía, lo que sí recuerdo es "jugar" con las cámaras que nos dejaba mi padre.


Crecí como fotógrafo de la mano de mi padre, ya que tanto a mi hermano como a mí, nos llevaba con él a numerosos reportajes.

Aprendí la fotografía como se aprende a andar, sin darme cuenta. No tuve que tomar la decisión de un día ser fotógrafo, ya que, sin darme cuenta ya lo era... Me gusta y no quise ser otra cosa.


A lo largo de mi andadura, desde la fotografía analógica a la digital, desde la toma tras la cámara al laboratorio, mi trabajo ha ido adaptándose y evolucionando con las nuevas tecnologías que me permite mantener viva mi inquietud, las ganas de aprender y mejorar, y expresar mi forma de ver, a través de la fotografía.

Como todos mis colegas utilizo programas de retoque y edición. Son un gran complemento, pero como fotógrafo que soy, creo que una buena fotografía se basa en un buen planteamiento del encuadre, la composición y la iluminación.


Mi trabajo se centra en la fotografía social, industrial, retrato,...y sobre todo el reportaje de boda, buscando siempre esa foto llena de sentimiento y emoción.


Quiero mostrar mi gratitud a todas las personas que confiaron y siguen confiando en el trabajo que llevo tantos años realizando, y especialmente a todas aquellas parejas (no me atrevo a decir cuántas…) que dejaron en mis manos la labor de inmortalizar un día tan importante como el de su boda.


Desde aquí quiero agradecer a mi familia de Ciudad Rodrigo -Foto VICENTE- todo el apoyo que me están dando en mi nueva vida en San Sebastián, y cómo no, el que a diario me da mi familia de San Sebastián.